miércoles, 10 de febrero de 2010

No puedo localizarle: ¡No tengo su Messenger!

Ayer al llegar a casa, mi hija (15 años), estaba muy alterada. Según me contó tenía que repasar una trabajo con un compañero de instituto. El trabajo debía ser entregado al día siguiente. Ingenuo de mi la pregunté que si el problema estaba en que no le podía localizar (evidentemente yo estaba pensando en el teléfono). Su respuesta me dejo helado: ¡Papa como quieres que le localice, si no tengo su messenger!.

Nuestros hijos, a diferencia de nosostros, han nacido conectados: inicialmente fueron los móviles y aquellos dichosos sms que nosotros no podíamos descifrar, ahora son las redes sociales basadas en  Tuenti, Facebook ...donde comparten ideas. Pero si quieren comunicarse On-line, lo hacen vía Messenger.

Intentaré averiguar bajo que extrañas circusntancias deciden las vías de comunicación con sus amigos: si es un amigo "de móvil" o si lo es "de messenger".

Estoy pensando si me debo crear una cuenta en messenger para charlar con mis hijos...Aunque me temo que lo mismo no me agregan como amigo...Dichosos Adolescentes !

jueves, 4 de febrero de 2010

Si hay que hablar de números prefiero mejor estos....

En el próximo sorteo de los euromillones, hay un bote de 100.000.000 €...
Por favor si no sois familia dírecta y os toca....NO ME LO DIGÁIS

P.D.: A mi famila, oye como os quiero a todos...pero un monón eh !

martes, 2 de febrero de 2010

El 67


Jamás pensé que este número me supusiera alguna reflexión en especial, pero parece que está será la edad que tengamos cuando optemos a nuestra jubilación. De cifra vacía, por insulsa, ha pasado a ser fría por ilusa: en los 22 años que llevo en esta profesión sólo he conocido a dos personas que se han jubilado en ella.

El retorno

Después de dos años y medio, lo siento....he vuelto.

Leía hace un par de horas un artículo, donde otro compañero de reflexiones, comentaba la dificultad que entraña el tener diferentes usuarios y password para muchos de los elementos que empleamos hoy en día: PC de casa, Portatil de la oficina, web del banco, acceso al blog...

Pues eso que doy fé de la dificultad de gestionar tantos usuarios (hace dos años y medio que olvidé mi usuario del blog). Hoy como por arte de magia, la he recordado. Por lo que aquí estamos.